
Ya hay muchos que se dedican escribir artículos en blogs obtienen importantes beneficios, sobre todo los que escriben sobre moda o tecnología. Pero hay otros muchos campos que no están tan cubiertos o nichos que no tienen ningún referente y que están esperando a que alguien salte para seguirle.
Son muchas las personas que comienzan a escribir un blog un día con mucha ilusión y tras redactar dos o tres artículos o post y no ver resultados palpables, se desaniman y dejan de escribir; un error.
Ser bloguero de éxito lleva mucho tiempo. Se trata de una tarea en la que no existe el éxito fulgurante. Por eso triunfan los que tienen paciencia y entre sus virtudes destaca la perseverancia. ¿Por qué? Pues por una razón fundamental: porque un bloguero de éxito tiene que tener su blog muy bien posicionado para captar muchos seguidores y posicionar un blog lleva tiempo.
Pero empecemos por el principio: ¿de qué escribo? No, lo que primero que tenemos que pensar es ¿para quién escribo? Eso es lo que denominaremos nicho de mercado. ¿A qué nicho me dirijo? Pues si queremos montar un blog como negocio, debemos buscar un nicho que esté desprotegido, que no tenga mucha competencia. Así nos resultará más fácil introducirnos en el mercado. Pero recuerda también algo muy importante: tiene que ser en una materia que dominemos o que estemos dispuestos a documentarnos bien para ofrecer contenido de valor.
¿Por qué es importante que el contenido sea de valor? Porque la gente no está para perder el tiempo con tonterías. Leer un post le llevará unos minutos y si le gusta, si aprende, si descubre algo que no sabía, se suscribirá al blog y se lo recomendará a sus contactos en redes sociales. De esta forma obtendremos más seguidores y estos seguidores enlazarán nuestro contenido a sus respectivas webs, blogs y redes sociales.
De esta manera, Google sabrá que nuestro contenido es muy valorado y cuando un usuario busque información relacionada con nuestro contenido, Google le ofrecerá nuestra información antes que la de nuestros posibles competidores. Así poco a poco iremos creciendo, pero como decía anteriormente esto no se consigue en dos días, sino que esta misma operación se tiene que repetir una y otra vez con los post que escribamos. Por eso lleva tiempo, pero para no desanimarte piensa que todo el tiempo que estás empleando es una inversión para el futuro.
Bien ya sabemos sobre qué vamos a escribir. No he dicho antes que tenemos que escribir o actualizar el blog con frecuencia, para que Google nos premie con una mejor posición en la serp o resultados de búsqueda. Y también es aconsejable desarrollar un estilo propio, que nos reconozcan por nuestra manera de expresarnos.
Pero esa manera de expresarnos tiene que estar en consonancia con nuestro público objetivo, nicho o target. Nuestros destinatarios se tienen que ver identificados con nuestra forma de expresarnos, se tienen que reconocer con nuestros textos, tenemos que conseguir lo que se conoce como ‘engagement’ o vinculación de nuestro público con nuestra marca.
Y una vez que ya tenemos todo esto conseguido, solo nos queda venderlo, es decir, llegar al mayor número de gente posible. Para eso lo que mejor funcionan son las redes sociales. Divulguemos nuestros contenidos a través de las redes sociales, sigamos a otros expertos o ‘influencers’ de nuestro tema para que él también nos siga a nosotros y nos enlace.
Pero a estas alturas del post, muchos de vosotros os estaréis preguntando que dónde está el negocio. Aquí tenemos varias líneas de monetización o de convertir nuestros contenidos en dinero:
- Lógicamente la publicidad. Si tenemos muchos seguidores, muchas personas querrán anunciarse en nuestra página y eso es dinero. Pero lo que es más importante para los anunciantes es que en nuestra página tienen a un público perfectamente perfilado y segmentado. Y eso tiene mucho valor, porque lo que les estamos ofreciendo es un público potencialmente interesado en lo que el anunciante quiere ofrecer. Por supuesto que la televisión tienen muchísima más audiencia que nosotros, pero los anunciantes en televisión pagan mucho dinero por llegar a mucha gente cuando seguramente la mayor parte de esa gente no está interesada en el producto que le ofrece.
- Escribir por encargo. Esto está directamente relacionado con el punto anterior. Si tenemos un público con un perfil muy concreto y que comparte un interés común, una empresa puede querer que escribamos sobre un producto o servicio que ofrece y que está directamente relacionado con la temática del blog y le podemos cobrar un buen precio por ello. Ten en cuenta que las empresas cada vez prestan más atención a los blogueros y menos a los medios de comunicación de masas, por lo que una gran parte del dinero que antes invertían en medio de comunicación ahora lo están derivando a blogueros e ‘influencers’ porque entiende que tienen más credibilidad e influencia entre su público objetivo.
- Además de todo lo anterior, hay otras vías complementarias de monetización, como los espacios patrocinados, el comercio electrónico, la venta de cursos… que puede ser también importante para rentabilizar nuestro blog.
Ya sabéis, ¡ánimo y a por ello!