
Si todo el mundo coincide en señalar que la vida evoluciona a una velocidad de vértigo, la formación no se puede quedar atrás y tiene que hacer frente a los retos que esa evolución le impone. La metodología y la didáctica deben adaptarse a los nuevos tiempos. Las empresas y centros de formación o innovan también en este campo o desaparecen.
El Aula invertida o ‘Flipped classroom’ es un modelo pedagógico que plantea transferir parte del proceso de enseñanza y aprendizaje fuera del aula con el fin de utilizar el tiempo de clase para el desarrollo de otras actividades más complejas, que favorezcan el aprendizaje. La implementación de este modelo se ha visto favorecido por las nuevas tecnologías que abren las posibilidades y alteran los roles tradicionales de docentes y estudiantes.
Los cuatro pilares del Aula invertida son:
- Entorno flexible: Espacios adaptables donde los alumnos eligen cuándo y dónde aprenden.
- Cultura de aprendizaje: Enfoque centrado en el alumno, en el que el tiempo de clase se dedica a explorar los temas con mayor profundidad y crear más oportunidades de aprendizaje. Los estudiantes participan activamente en la construcción del conocimiento.
- Contenido intencional: Los profesores emplean contenido intencional para maximizar el tiempo de clase, con el fin de adoptar métodos y estrategias activas de aprendizaje centrados en el estudiante.
- Educador profesional: Los educadores profesionales observan continuamente a sus alumnos proporcionándoles retroalimentación relevante en cada momento.
El diseño didáctico se plantea desde lo presencial a través de clases magistrales y se complementan con algunas lecturas de textos y la resolución de problemas. Las habilidades de orden inferior son realizadas en espacios externos al aula mientras que en el interior de ella se focaliza la atención en el análisis, evaluación y creación.
Aula virtual
En el Aula virtual, los alumnos trabajan los conceptos por sí mismos, usando normalmente vídeos educativos. También suele ser frecuente la escucha de podcasts o la colaboración entre los compañeros en comunidades en línea, implementando el uso de las TIC en educación.
En clase, en cambio, el plan es dedicar el tiempo para la discusión, resolución de dudas y tareas más creativas que requieran la presencia y el asesoramiento del profesor. Esto puede llevarse a cabo en grupos o individualmente, lo que permite marcar diferentes ritmos para cada alumno según sus capacidades y mejorar el ambiente de trabajo en el aula gracias al rol activo de cada estudiante. No hay que olvidar que estamos hablando de un formato ‘blanded learning’, es decir, semipresencial. Veamos de qué maneras se puede aplicar este concepto en la metodología del Aula invertida:
- Flipped mastery learning: Los estudiantes trabajan en los contenidos de curso a su propio ritmo y al llegar al final de cada unidad, deben mostrar dominio de los objetivos de aprendizaje antes de pasar al siguiente tema. Los alumnos pueden mostrar evidencias de su aprendizaje a través de videos, hojas de trabajo, relatos experimentales, programas, proyectos, ejemplos, entre otros.
- Flipped learning + Aprendizaje cooperativo: De este modo, el alumno ha de asimilar y comprender el contenido de más peso teórico en casa, a través de las grabaciones elaboradas por el profesor, y el tiempo en clase queda dedicado a la elaboración de tareas y resolución de problemas y/o dudas mediante aprendizaje cooperativo.
- Flipped learning + Aprendizaje basado en retos: En vez de presentar a los estudiantes un problema para resolver, se ofrecen conceptos generales de los que los estudiantes obtienen los retos que tendrán que abordar. Además, se fomenta el uso de las tecnologías web y móviles, tales como herramientas y wikis colaborativos, que están disponibles para los estudiantes, pero que no se utilizan a menudo en los cursos.
Docente como organizador o guía
Los estudiantes tienen más flexibilidad y libertad en la navegación del contenido de los cursos, y los docentes tienen la opción de usar una gran variedad de estrategias para interactuar con sus alumnos. En este modelo, el docente actúa más como un organizador o guía en el proceso de aprendizaje, proporcionando los recursos y el apoyo necesario para permitir a los estudiantes desarrollar y dar forma a su propio aprendizaje. Ejemplos de estrategias que pueden ser implementadas por el instructor u otros facilitadores del curso incluyen:
- Responder a las preguntas del estudiante a través del correo electrónico o en los foros de la comunidad.
- Periódicamente dar retroalimentación sobre el trabajo de cada estudiante.
- Proporcionar recordatorios de motivación durante todo el curso.
- La identificación de los estudiantes que están luchando con el aprendizaje de un concepto y brindar soporte y guía en las discusiones para ayudar a superar los obstáculos.
- Periódicamente realizar vídeo conferencias o encuentros en el chat.
A continuación se recogen siete posibles formas de convertir nuestra clase en un aula invertida,ordenadas según el grado de complejidad al entrar en escena el desarrollo de competencias más elevadas en los procesos tanto de enseñanza como de aprendizaje:
- Clase inversa estándar: Los alumnos trabajan vídeos en casa y practican lo aprendido con tareas tradicionales en el aula.
- Clase inversa orientada al debate: Los vídeos asignados sirven para desarrollar debates o reflexión posterior en el aula.
- Clase inversa orientada a la experimentación: Los vídeos sirven como referencia para recordar y repetir aprendizajes.
- Clase inversa como aproximación: los estudiantes ven los vídeos en clase. Después, el profesor acude a resolver las dudas.
- Clase inversa basada en grupos: Combina el tipo de clase inversa anterior, pero el cambio se produce en el aula. Los alumnos se agrupan para trabajar la tarea asignada.
- Clase inversa virtual: Los conceptos de tiempo y espacio se redefinen, ya que se suprime el concepto de aula tradicional en el desarrollo de aprendizajes, entrega de tareas, evaluación…
- Invertir al profesor: El proceso de creación de los vídeos puede recaer bien en el docente, bien en los alumnos para demostrar experiencia o destrezas de orden superior.
Las herramientas que se pueden utilizar en el aula invertida son múltiples. A continuación se hace una síntesis de algunas de las herramientas más utilizadas en este modelo de enseñanza-aprendizaje que han sido clasificadas sobre la base de su utilidad dentro del aula invertida.
- Herramientas para la gestión de contenidos: es necesario tener una plataforma en abierto o de acceso limitado para la difusión de los contenidos que se pretende que sean visualizados. Las herramientas más utilizadas para la difusión de contenidos son:
- Blog
- LMS (Sistemas de Gestión de Aprendizaje) como Moodle y Edmodo
- Red social
- Herramientas para la edición de contenidos: Prezi, Powtoon, Microsoft PowerPoint
- Herramientas que funcionan como banco de contenidos: también son útiles los bancos de contenidos en los que los recursos multimedia y los contenidos ya están editados.
- Podcasting
- Video educativo
- Screencast
- Wiki
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